Miercoles 6 de diciembre del 2006.

La navidad se va acercando como una condena. Poco a poco nos va inundando el cerebro con sus llamadas constantes. Nos lo recuerda el arbol de navidad y el belen, la television, en los anuncios de las vallas publicitarias, en las luces de las calles, en la compra obsesiva de juguetes y demas regalos, en la preparacion de la cenas navideñas y sus dulces, en las notas de los niños y sus nervios, en las cartas a los Reyes Magos(Aun no he escrito la mia, ya es hora de que lo haga).
Tambien es el tiempo de las añoranzas y los recuerdos. Añoranzas de una niñez que ya no volvera y recuerdos tristes por los que se han ido o estan muy lejos.Pero no nos debemos dejar llevar por la melancolia o la trizteza. Son dias alegres y, como alegres, asi deberemos estar y estar especialmente detallosos con la gente de nuestro entorno.
Tambien son dias de esos suplicios de "comidas de empresas y sociedades varias", donde se come de mas, se bebe de mas y se dicen cosas de mas...y se tira a la basura mucho mas.
Y esta el despilfarro en todos los ordenes de la vida; se acabo la ecologia, el reciclaje, la contencion del gasto, la contencion del agua, etc...Todo es fiesta y en las fiestas...ya se sabe.
Son dias propicios para ese primer amor y beso de los catorce años, o quien a los quince años no dejo su cuerpo abrazar en unas navidades de alegria, bullicio y musica festiva.
Asi que hay que vestirse de fiesta, salir con la sonrisa pintada ebn los labios y aprender la frase de rigor: "FELICES FIESTAS".
¡Sed Buenos!.