Tuesday, May 30, 2017

Mareado y aturdido


Mareado y aturdido

en las calles somnolientas

como cuervos ansiosos

en una resaca marinera...



Dormitando y huido

entre charcos de xxxxx

balbuceantes espinas

atraviesan mis sentidos.



Voy huido y vomitando

regando espectros en esquinas

fugaces de dolores y cuentos,

marcando mi desgracia.



Voy y no ando, me pierdo,

laberintos de claveles

dispersos en la aurora

como huellas del xxxxx



Aturdido me pierdo y me re pierdo

en plazas de madera y huesos;

quebranto de silencios

serenos en la medianoche.



Giro en círculos volatineros

buscando solo una farola

una señal perdida y esotérica

que me permita abrazarla.

Sunday, May 28, 2017

Regalos de Navidad.


Regalos de Navidad.

Lo más difícil es decidir que regalar para poner bajo el árbol de Navidad; solo un detallito para la gente mayor, poco dinero pero algo que sea original, que sea útil. Es decir, lo de siempre, las tres B: bueno, bonito y barato, es decir, casi imposible.

Este año pues ya teníamos los calendarios de siempre, con la Virgen de la Milagrosa, uno por casa.

Buscando y buscando, devanándonos los sesos (lo reconozco, mas de una discusión matrimonial ha habido por culpo de esto regalitos y neuras incluidas) encontramos algo para los hombres: un kit para reparación de gafas (perfecto, útil y simpatiquísimo detalle). Uno, el de mi cuñado, por el uso normal de gafas, y para los otros dos por las gafas de leer, pues ya se sabe que la edad aprieta.

Para las mujeres también lo teniamos decidido, unos minutero digitales con imán para la nevera. Además, para la abuelita pues una calculadora de pegar y además solar. Perfecto, lo más difícil ya estaba ahora quedaba pues lo fácil, la compra, ¡je…je…je…JE, JE, JE! El destino es cruel como en las tragedias griegas.

Llegamos a la tienda “XXXXXX” y directamente nos fuimos los dos, ambos, los dos al unisonó, ¡ojo al parche!, casi de la mano al estante. No están los kits. Buscamos y rebuscamos y nada. Imposible que vendieran todos de golpe, era algo absurdo, impensable. Revisamos de forma inútil, ya puestos, toda la tienda. Nada de nada.

Terminamos preguntando al dependiente de la caja. Este puso, inicialmente,  cara de tonto ante nuestra demanda y explicación consiguiente; la cara de sorpresa e incredulidad paso a otra, la de que nosotros estábamos chiflados. No sabía nada de este producto, no existía y nunca existió en ese comercio quizás en otro llego a aventurar. Insistimos sin remedio ni razón, hasta nos enojamos…un poquito. Preguntamos a una chica que estaba por allí reponiendo cosas y atendiendo a la gente y lo mismo, no sabía nada de esos kits, no los recordaba e, incluso, al final, se dirigió a preguntar al chico del mostrador por lo que le dijimos que lo dejase que ya habíamos hablado con el…con el mismo resultado.

La cara que pusimos al salir era de estupefacción, seniles estábamos, y alucinados. Vimos, eso sí, los minuteros digitales, no estábamos locos, sabíamos lo que queríamos pero no donde estaba lo que deseábamos.

Nos miramos a los ojos y en marcha, a la otra tienda de la misma franquicia, por si las moscas. Íbamos no con mucha esperanza, de verdad. En esta ultima ya ni preguntamos, miramos, remiramos, nos fuimos, había que hacer la compra del día y la comida.

Mientras volvíamos yo seguía pensando. Alguien diría que era imposible…estábamos dudando ya de nuestra propia cordura; pero, incluso, yo visualizaba en mi mano la caja de papel marrón, el trocito de plástico transparente donde se veía en el interior el mini destornillador, los tornillitos, etc.; el cartelito blanco que ponía el nombre del producto y su composición, etc…como se lo enseñaba a mi mujer…me acorde, me vino como un flash,  que antes de verlos había cogido en mis manos pequeños unos binoculares de papel cartón….mi mujer me empezó a decir las tienda que habíamos visitado en el recorrido  ese día…el binocular nos dio la pista final, leve, lejana, increíble.

Después de comer fuimos y cumplir con el ritual del sudoku y el cafecito,  a “YYYY” y… ¡allí estaban! El mismo precio (3 euros la unidad) , el mismo color, todo idéntico. Sonreímos al pensar en nuestro error. Lo malo y extraño es que ha sido no un error de uno, mío como es habitual, de siempre, sino de los dos. Un poco absurdo. Los compramos, tres eran tres la hijas de Elena….

Por el camino, seguimos el ritual del día de la búsqueda pues a comprar lo que nos faltaba ante la mirada estupefacta del dependiente al vernos entrar de nuevo pero con paquetito en la mano, al que echaba miradas de soslayo.  Le pedimos los minuteros, tres también, tres tristes minuteros, pagamos  (10,50 euros) y medio riéndonos de nosotros mismos salimos de la tienda. El dependiente la verdad más que discreto y educado, no se por dentro por dónde irían sus ideas sobre nosotros.

Otro trabajo cumplido…

Wednesday, May 24, 2017

Tienes que creerme...


Tienes que creerme:


El día nos engaña,

La noche nos duerme

Con su sopor cruel

Y  con falsos sueños.

La luna, cruel y fría,

Nos llama a la vida,

Nosotros, no la oímos.

El viento que llama

A la sangre, la nieve

Pisada se vuelve

Rastro de azules fríos

En la huella del barro

Que dejó el niño.



Tienes que creerme, niña,


El azul del nacer

Se tiñe de rojo 

En el nacimiento.

Sophia esta perdida

En el limbo blanco,

De la luz, perdida.

Todo el esta huido

En ese momento

Fugaz. La moneda

No paga a Caronte

Que, con un desprecio,

La tira a las aguas.



Tienes que creerme, hija,


La sangre se paga

Con sangre, renacer

De toda vida, mil

Quinientos de sucios

Dirhams es la bolsa

De sangre esperanza

Para la pobre niña.

Otro mundo es posible,

Te dirán los artistas,

Otro mundo, quizás,

Pero no el de esta esquina.


Saturday, May 20, 2017

Atajo.


Atajo.

Te has quedado en la cama más tiempo del debido, esos diez minutos después de sonar el despertador que te das como un regalo, se pasaron de pronto de forma mágica en más de media hora. Vas a llegar tarde a la reunión, esa de la que dependerá tanto tu futuro dentro de la empresa y la consideración de tu trabajo.

Te levantas corriendo, asustado. N te duchas. Un afeitado rápido, una pasada del cepillos por los dientes, la ropa del día anterior, no desayunas y te lanzas al garaje donde el coche está mal aparcado y otro le impide la salida correcta. No importa, no puedes perder tiempo, entras en el, dejas tu cartea en el asiento del copiloto y arrancas. Sabes que puede hacerlo, escaso sitio, hay que maniobrar peor no puedes perder más tiempo, el tiempo es oro y, en este caso, platino o plutonio radiactivo.

Das marcha atrás, un poco adelante y girando a la derecha. Marcha atrás para la izquierda. Marcha normal par la derecha y ya vez que puedes salir. Eres un genio. Sales no sin llevarte media columna y, con ella, todo el lateral derecho.  No importa, ya estas saliendo y hay que ganar el tiempo perdido.

El coche mal aparcado no te deja ver bien y, claro, casi chocas con otro coche que ya salíais. El corazón parece que se desboca del susto, tiene que respirar, oyes a tu corazón como el expreso de las ocho y media de la noche. Respiras hondo, el conductor del otro coche después de tocarte el claxon te ha enseñado el dedo. Que le den. Imbécil. El coche esta calado, lo arrancas de otra vez, empiezas a sudar.

Decides tomar un atajo en vez de coger la M-30, piensas que ganaras más tiempo.

Bajas por la Castellana y te metes por Serrano. No te acordabas de  que las obras habían empezado y te vez en un atasco de mil demonios.  No  aguantas más y coges la primera calle a mano izquierda, mas obras pero aquí solo hay un carril, estas atrapado, imbécil, que eres un imbécil.

Decides volver a la castellana y eso significa giro a la derecha,  otro giro a la derecha y después bajando meterte en esa arteria. Primer giro a la derecha esta vallado, prohibido, una gigantesca grúa está subiendo nos e sabe que a un edificio, parece que la operación va a durar. La siguiente no te vale es a izquierdas, a volver por donde habías venido. La siguiente también es en dirección contraria, no lo entiendes, te ves en medio de una maldición de los dioses o un relato de Kafka.

¡Eureka!, giras a la derecha, avanzas bien y la calle bastante libre. Te para un guardia y te manda de de vuelta, una accidente, dos muertos, lo siente. Te mesas lo cabellos y despotricas contra todo el mundo. El agente se mosquea, le dices que no es nada contra de él, solo problemas de tiempo.

Avanzas por el camino que te obliga el agente, mas para arriba, más arriba, giras una vez, dos veces, parece que la calle se abre a tu paso. Oyes en la lejanía sirenas, muchas sirenas. No lo entiendes. Te paran en el semáforo ante de la castellana. Se pone delante de ti un agente municipal. No te dejan avanzar. Ves pasar delante de ti a toda leche un montón de motos de la policía con las luces encendidas y los claxon atronando, (te vas arrancando los pocos pelos que te quedan, adiós peinado de peluquería y tratamientos costosos anti caída)detrás los coches de la seguridad, más detrás unos coches diplomáticos por las banderitas que lucen (tu miras el reloj y te comes la pocas uñas que tienes, pobre manicura), detrás (la fila es interminable y aunque van va a mucha velocidad el tiempo está detenido para ti) más coches escolta y detrás, por fin, las ultima motos abriendo el trafico.

Se metes en la arteria acordándote del Gallardón y todos sus antecesores. Avanzas parando en semáforo si, semáforo no. Cibeles, Neptuno, M-30, no sabes por qué estás aquí pero continuas dirección norte.

Llegas, ves la hora y  no lo entiendes. Más de hora y media de retraso, sucio, sudado, sin  uñas, sin pelo, el traje arrugado,, la corbata rota, al camisa desgarrada y llena desangre allí donde te has arañado. No quieres entras, dudas una y otra vez. Vez la entrada prometida.

Coges el teléfono y llamas, la ultima idea brillante que tienes. Te lo coge la borde de la secretaria del Director. Le dices de un problema a ella que se queda sin palabras. Te contesta si no leíste el correo de anoche en el que se anulaba la reunión, si, te lo había mandado, que no te preocupases. Se nota que le suenas traro, te pregunta si estás bien. Le contestas como puedes y cómo puedes regresas a casa….y es que: Por definición, un atajo es el camino más largo entre dos puntos.

Wednesday, May 17, 2017

Apatridas.


Apátridas



Caminan sin volver la vista atrás.

Cadencia de sones al paso

De pies, carretas, bueyes

Abandonados

Por Dios y los hombres.

Son apestados

Con las manos por delante,

Ahuyentando obstáculos  solo visibles

Para ellos.

A un camino, otro camino

A un país, otro país

A una lengua, otra lengua

A un amor, otro amor

Detrás...........van dejando,

En pobres sepulturas,

Tíos, sobrinos, padres, abuelos



Detrás......van abandonando

Cuentos y memorias

De una historia que ya no es suya.



Detrás.......pesadillas, pobreza, miseria

Esperanzas incumplidas



Detrás......la violencia decretada, marcada,

Como un estigma racial



Detrás......hijos no nacidos, larvas optimistas

Del rayo gris troquelando a las madres



Detrás.......un sol insomne quemando

Abrasando brazos y piernas



Detrás.....la marca, los azotes, la furia

Desencadenadas del poder absurdo



Detrás......no queda nada, solo la huida

La búsqueda de una identidad y un afecto

de arboles retorcidos.



Con las manos por delante

Ahuyentando penas

En una oración de signos,

En la última penitencia

Se curvan contran el viento,

Se erguen contra el agua.

En sus manos el fuego,

En sus pies la cadencia,

La música de la tierra.



Amansan las tormentas,

Ahuyentan a las fieras,

Saturan el aire fugaz.

Monday, May 15, 2017

Una caja...


Necesidades, sueños, deseos.

Pelearon por la caja mágica que concedía tus deseos.

Atravesaron selvas llenas de peligros. Cruzaron ríos bajo puentes de lianas peligrosos. Corrieron escapando de avalanchas de rocas y polvo, el temible simún del desierto. Huyeron de las horribles hormigas rojas, por poco. Se salvaron de las pirañas famélicas….llegaron a su final.

Una cueva excavada en la roca. En su centro un ara de pizarra negra. Sobre ella, en el centro, alumbrada por siete cirios blancos encendidos con una luz trémula que formaba sombras amenazantes.

De esas sombras se alzo un hombre con una túnica roja. Alto, mas de dos metros; terrible, con la mirada de la sabiduría en sus ojos tristes. Les saludo con un inclinación de la cabeza y, sin preguntarles porque estaban allí, les pidió que dijeran para que querían la caja.

La doctora le dijo que era para devolverla a sus dueños, los viejos y pobres allende de la montañas.

El ayudante que necesitaba conseguir un puesto de profesor en la universidad tranquilo y sin sobresaltos.

El traidor, sacando de su bolsillo un revolver, dijo que la necesitaba para conseguir el dinero que no tenia, que había dilapidado en juegos y extrañas juergas, para conseguir poder y riqueza.

El santón le dijo que no hacía falta eso, señalando la pistola. Cogió la caja y se la entrego diciendo que era el que la merecía.

El traidor la cogió con miedo y esperanza y pidió su sueño. Nada paso. El silencio era una losa en la cueva. Considero todo una estafa, la arrojo al suelo y se fue.

El santón la recogió y se la entrego a la doctora. Le dijo que la devolviese a su dueños, allí haría bien, más que aquí. Y le dijo concedía aquello que era bueno para el poseedor y, en el otro caso, lo bueno era no dar nada; lo mejor para el hombre atormentado era no poseer nada.

Y así la caja mágica regreso a su lugar. Allí esta. No la busquéis pues podéis encontraros con que lo mejor para vosotros no es vuestro íntimo sueño, sino que es….


Friday, May 12, 2017

¿Que o quien soy?


¿Qué o quién soy?

Me pregunté apenas abiertos los parpados, bajo la luz macilenta del amanecer del primer día de verano. Porfían las telarañas de los recuerdos tan pasajeros...se desatan ya, viejos y cosidos a punta de tijeras...la culpa vuelve como un indeseable visitante, como cajones ocultos que se abren acusadores; culpa, también dudas, alegatos de ignorancia...¡quien pudiera volver al pasado y corregirlo!...el paquete de cigarros en el bolsillo de la camisa...colgando, hecha un higo, del respaldo de la silla. ¿Donde coño puedo estar?...leves angustiosos segundos en la inopia...noto mis calzones mojados, me doy asco..pestañeo, fogonazos de luces estrambóticas se clavan en mi cerebro...sucio y perdido, mi futuro abierto como los zapatos, solo uno, dentro del orinal descascarillado...

Monday, May 08, 2017

Esta sentado...


Está sentado en la mesa de la cocina, con aire ausente, la mirada perdida en la silla vacía del otro lado. En su lado un plato con la pobre cena de esta noche. Un vaso rojo de cristal medio lleno es la única nota de color de la mesa.



En frente, en el otro lado, con una silla vacía, sobre la mesa de formica blanca, un plato vacío, unos tenedores y un vaso también vacío.



Cada vez que lleva algo a la boca siente como una puñalada en el hígado. Come sin ganas, mirando el  asiento vacío de enfrente.



La echa de menos. Ya pasaron más de dos años pero sigue echándola de menos. No le perdona el que se hubiera ido sin el.



Para él, el dolor no es de ese insulso músculo que es el corazón. No. El dolor es algo muy complejo, hecho de extrañas combinaciones químicas, de hormonas, de proteínas, de feromonas, de ácidos y peaches que se combinan y destruyen, de potasio y hierro, combinado todo con unos porcentajes de ausencia. Por eso el corazón,  con su heridita, no es el dolor. El corazón no sufre. EL sufrimiento es una patada directa al hígado, una puñalada al hígado, un retorcerse de riñones  e hígado.



Todas las noches, con la caída del sol,  hace el mismo ritual, pone la mesa para los dos, se hace, tristemente, el filete a la plancha, unas pocas patatas fritas y un trocito de tomate. Se sirve, casi siempre, un buen vaso de vino, el de la aldea, sin bautizar y sin química. Antes hacia cena para dos pero todo terminaba en el cubo de basura. Se siente inútil y solo, se siente como un superviviente de una gran traición al que le queda cenar como una rutina de años y la soledad inmensa.



Come en silencio, mirando al vacío.



Sabe que la muerte es una gran broma cósmica. Que la gente debiera morir a pares o en tríos o en grupo, que dejar una pata colgando sobre un triste planeta es una injusticia y un sinsentido.



Y, a veces, incluso odia a su mujer por dejarle, por abandonarle antes de tiempo. Quisiera seguirle allí donde estuviese, seria tan fácil, pero su educación le dice que matarse es el único pecado que jamás, jamás, le seria perdonado y sigue viviendo con la silla enfrente vacía y esa copa de vino medio llena de algo que, realmente, no es vino y que no tomara nunca…y la esperanza de que, con la noche, le haya llegado la hora final y, con ella, el final de la soledad y de esa espera, segundo a segundo, de la muerte que no le visita.

Friday, May 05, 2017

Mis manos gimen llenas de vacío,


Mis manos gimen llenas de vacío,

lloran enrojecidas gotas de silencio

culpable...

se estiran inútilmente hacia el infinito

de una lista inadaptada de tiempos

culpables.

Mis manos ¡Oh! mis manos manchadas

marcando paredes y muros y mesas y sillas y rostros y pasamanos y arboles caducos y puertas y fantasmas y pieles rotas y lagrimas robadas y pelambreras arrebatadas y huesos quebrados y días perdidos y cariños arrebatados y rabias infinitas corroyendo ansias e inocencias perdidas en abismos pasionales.....

¡Culpables!...

cercenadas de caricias y mimos

mutiladas por crueldades de viejos sayones

culpables...

siempre culpables....

Monday, May 01, 2017

Lo roconozco, me despiste...


Lo reconozco me despiste una vez más. No doy aprendido en la clase que tengo y los alumnos a los que trato de enseñar alguna cosa.

Una llamada inoportuna, la visita a la secretaria de la escuela para dos papeles y… ¡zas!...la sorpresa, la emoción.

Estamos con áreas de polígonos, nada del otro mundo, si ya lo han dado los cursos anteriores. Justo con el trapecio y tratando de explicar de dónde sale la formula aunque no la aprendan, ya sabéis… ¡ah! ¿No?, pues esa de base mayor mas base menor divido por dos y multiplicado por la altura. Ya os digo trataba de que supieran someramente de donde viene esa fórmula cuando sonó mi móvil y mi viajecito, cinco minutos a la secretaria, no mas, de verdad. Deje encargada a Mara de la clase aun sabiendo la inutilidad de la misma pero no hay mucho donde elegir.

La contable me demoro un poco más de la cuenta y los cinco minutos se transformaron en diez o algo así, poco más o menos. Regrese y torcí el gesto cuando veo a Mara fuera de la clase como encogiéndose de hombros, pasando ya de todo, algo había pasado o estaba a punto de pasar sobre todo notando que la clase estaba en un silencio anormal y sepulcral, no era normal y de buen augurio ese silencio.

Abro la puerta y…los chicos con la espalda apoyada en las paredes mirando al centro de la estancia. Toda el aula vacía salvo ese centro mágico donde había florecido como por arte de magia una pirámide de mesas y sillas, incluyendo mi mesa y mi silla…Respire hondo tres veces antes de hablar mientras apretaba los puños con la desesperación. Solo les dije que tenían cinco minutos, solo cinco minutos, salí y cerré de nuevo  la puerta. Mara a mi lado me dijo por lo bajini que lo sentía.

A los cinco minutos entré, bueno, más bien diez o algo mas mientras algo de ruido se oía, ya todo en orden, cada cosa en su sitio y una sonrisa cómica en las caras de todos ellos sentados en sus respectivos asientos.

Me senté y como si nada hubiese pasado pase a retomar la clase donde la había dejado. Aun me rio cuando me acuerdo de todo y del trabajo que tuvieron…en el examen final pues tocaron pirámides y triángulos y trapecios….je, je, je...