Hoy me he despertado antes de la hora; el despertador aun no habia sonado. Comprobe con desgana la hora. Tenia mas de media hora todavia hasta que la obligacion de apagar al monstruo ruidoso me levantase. Me di media vuelta y abrace a mi espectro, el que duerme conmigo casi todas la noches. Es incomodo dormir con un espectro, sobre todo si es uno de esos "espectrae cornudun" que te llena de heridas y hematomas. El mio es de los "purgatories", se supone que te hace padecer en vida los sufrimientos de la muerte y su paso pero, con los años de roce y cama, hemos llegado a un entente cordiale: el me fastidia lo que puede y yo le soporto lo que puedo. Lo malo es que te deja la cama llena de huesos, de las pieles que se les caen por las sabanas, de sus pelos y, entre nosotros, no lo digais muy alto que se ofenden, huelen putrido como a huevo podrido. Este mio sustituyo hace mas diez años a otro de la clase "perrerunia", nos llevabamos muy mal, a la gresca todos los dias, era, ademas, inabrazable de etereo, pero, sobre todo, ruidoso como ninguno sobre todo en las noches de luna llena, inaguantable.
Desde la primera noche nos aclimatamos con la logica de: "¡Oye! me vas a espectrar muchas noches durante mucho tiempo ¿no te parece que lo podias hacer en la cama?. Asi podriamos estar un poco mas descansados y si hace frio estaremos calentitos y si estamos tristes nos podemos abrazar y consolar".
Lo entendio y a partir de ahi dormimos juntos. Bueno, duermo yo y el me tortura, pero bajito, para no despertarme. No hay peleas, no hay protestas. Bien para los dos. Asi diez años.
Casi nunca lo abrazo, es muy incomodo. Lo abrazas por la espalda y te quedas con la clavicula en el brazo. Lo abrazas de frente y te quedas con las costillas pegadas a tu pecho. Te abrazas boca arriba y le rompes la cadera. Y menos mal, hay espectros que no puedes abrazar de enormes o de pastosos, o de gelatinosos, o de etereos o de monstruosos con pinchos como hachas.
Se que el agradece que, de vez en cuando, lo abraze. Esta muy necesitado de cariño, nadie le atiende, nadie le escucha....ni yo que me duermo y tengo un sueño muy profundo.
Cuando sonó el despertador, como todos los dias, le digé: "eres el espectro de mi noche pero el dia es mio, ¡esfumate!"