Me iza más allá de las estrellas
Como una ofrenda a Orfeo
Que, viendo mis pies de barro
Y mi pecho vacío,
Me rechaza en una mueca pobre,
Desesperada.
Pobre Orfeo solo y aterido.
Me iza más allá de las dimensiones
Del tiempo y del espacio
Donde ávidos fantasmas ansían
Regresar a la materia, polvo, agua, barro.
Me expando cuasi infinito en mí
Pequeñez absurda
Infinito, un Dios Doliente
Y como huevo primigenio
Ínfimo, fútil, inanimado, inútil.
No comments:
Post a Comment